Por malambo en Invariancia.General | 2005-08-06
Desde hace una semana Marta y Nestor están de visita en casa y no pueden entender como es que no me apasiono y grito como marrano en cada partido de fútbol. Es inconcebible para ellos que no sea simpatizante de ningún equipo porque están convencidos de que para ser varón te tienen que gustar dos cosas. Una está fuera de discusión, la otra es el fútbol.
Como por estos lares hay partidos todos los días, montaron un plan que no por rústico deja de ser efectivo: Cerveza, picada y fútbol por TV. Todos los días.
Al principio contaba las sombras de los jugadores para adivinar la cantidad de torres de iluminación por estadio, pero la tarea pronto me aburrió. Cuando creí que indefectiblemente tendría que observar a 22 chavales que por correr una pelota cada uno gana más dinero en un mes que un pueblo pequeño en todo un año, noté que uno de los defensas estaba entregando mal los pases.
¡Está tirando pases al entorno! grité saltando de la silla. La sorpresa de Nestor fue doble. Primero por mi súbita explosión pasional en un partido mediocre de la primera B; segundo porque ¿qué demonios quería decir "entorno"?, si claramente el defensa era un queso que les estaba regalando la pelota a los contrarios.
Justamente, le expliqué, puedes considerar que cada jugador es un nodo (¡si hasta vienen numerados!) y los pases que se hacen son los vínculos entre ellos. ¿Ves?, le increpé, el pase de recién es el vínculo <4, 9>. Ahora eran los ojos de Marta que me miraban desorbitados, ¿
vínculos?, ¿
nodos?, ¿
entorno?. Bueno, llámalo pase <9, 6> en vez de vínculo, llámalo jugador en vez de nodo si quieres. El entorno, claro, es el equipo contrario.
¿De qué equipo contrario me hablas? Los dos son equipos contrarios entre sí, intervino Nestor. Sí, claro, le contestó Marta ganándome en el arranque, pero se trata de dos grupos diferentes y los de uno no le hacen pases a los del otro, salvo por equivocación; lo que hace alguien del otro equipo -continuó después de comer una aceituna- es quitársela y a eso no le puedes llamar "pase", es otro tipo de
vínculo, dijo guineándome un ojo.
Así que puedes tomar cualquiera de los dos como ejemplo y llamar
entorno al otro, intervine. La cuestión es ver cómo se actualizan esos vínculos (es decir con qué frecuencia cada jugador le hace pases al otro). Sí, contestó Nestor, pero entonces tienes que usar una
red ponderada que acumule en su
matriz de adyacencia los pases que cada jugador le hace a su compañero (o al
entorno).
Si revisamos la historia de los partidos, interrupió Marta, que siempre fue muy jugadora, podríamos hacer unas redes complejas del fútbol y asociar los vínculos ponderados de cada partido con su resultado, y apostar y ganar mucha platita.
¡De qué redes complejas me hablan! grité, las únicas redes que existen están detrás de los arcos y una de ellas se está inflando de un pelotazo puesto justo en el ángulo, ahí donde al arquero le es imposible llegar.
La historia fue casi, casi, como la conté. Lo cierto es que este fin de semana los comprometí a que me ayuden a anotar los pases. Al fin y al cabo el fútbol no era tan aburrido.
2005-08-06 09:20 | 6 Comentarios